Diagnosticada con Etapa IV de cáncer de tiroides a los 13 años, Hazel estaba preparada para morir, hasta que a los 14, una medicina milagrosa encogió los tumores en sus pulmones… por ahora.
Dos años post milagro, Hazel de 16 años esta post todo lo demás también: post colegio, post amigos y post normalidad. Y aunque podría vivir por mucho tiempo (lo que sea que eso signifique), Hazel vive anclada aun tanque de oxigeno, los tumores apenas mantenidos a raya por medio de un constante ataque químico.
Entra Augustus Waters. Una pareja hecha en un grupo de apoyo para adolescentes con cáncer. Augustus es guapo, está en remisión y, para sorpresa de Hazel, está interesado en ella. Estar con Augustus es tanto un inesperado destino como un muy necesitado viaje, incitando a Hazel a reexaminar como salud y enfermedad, vida y muerte, la definirán a ella y al legado que todos dejamos atrás.
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